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El Dilema del Músico: Trabajador o Empresario en la Industria Musical

martes, 5 de septiembre de 2023
Este artículo aborda el persistente dilema al que se enfrentan los músicos, debatirse entre ser considerados trabajadores o empresarios en la industria musical. A pesar de los problemas expuestos durante la pandemia, la situación laboral de la mayoría de los músicos sigue siendo precaria, intermitente y carente de protección social.

La Coordinadora Sindical de Trabajadoras/es Músicos (CST-Músicos) destaca que antes de la pandemia, aproximadamente el 90% de los músicos trabajaba de manera irregular, sin contratos ni altas legales, a menudo facturando como falsos autónomos. A pesar de algunos avances, como el Estatuto del Artista, la situación general no ha mejorado significativamente.


Los músicos se ven obligados a asumir roles empresariales además de sus responsabilidades creativas, lo que puede ser agotador y perjudicar su creatividad. Además, la industria musical ha experimentado cambios significativos debido a la digitalización y la proliferación de plataformas de streaming, lo que ha complicado aún más la obtención de ingresos estables para los músicos.


La discusión se centra en si los músicos deben ser considerados trabajadores o empresarios. La mayoría de los músicos ganan menos de 7,000 euros al año, y solo el 10% supera el salario mínimo interprofesional. La mitad de los músicos que están registrados como autónomos en la Seguridad Social ganan menos de 700 euros al mes.


La falta de claridad sobre si los músicos son trabajadores o empresarios dificulta las negociaciones y la mejora de sus condiciones laborales. La mayoría de los empresarios, incluidos los gestores de salas y promotores de festivales, rara vez contratan a los músicos de manera formal.


Las soluciones propuestas incluyen la reducción de la cuota de autónomos y el proteccionismo en la industria cultural y musical. Sin embargo, la falta de una patronal clara y una representación adecuada complica las negociaciones laborales. También se destaca la necesidad de que las empresas cumplan con la ley y se respeten los derechos laborales de los músicos.


Fuente: eldiario.es